El Rebe explicó que el punto neurálgico de Rosh Hashana lo podemos encontrar en el Salmo del Rey David: "Alegrensen con temblor" (2). Por un lado el temor del juicio y por otro la alegría de saber que Hashem es benévolo.
Se cuenta sobre un Jasid que gozaba de un muy buen pasar y repentinamente perdió todo su capitál. Acongojado se dirigió a su Rebe, quejandose de su situación sin entender el proceder divino. El Rebe le dijo: "Hasta ahora solo escucho, de tu boca, lo que Hashem debe hacer por vos, pero todavia no mencionaste que es lo que vos tenes que hacer por Hashem. Cuando empiezes a pensar que debes hacer por Hashem, Hashem, seguramente, empezará a pensar que debería hacer por vos, mandandote bendiciones..."
El jasid al salir de la audiencia con el Rebe dijo: "Ahora entiendo el versículo: "Alegrensen con temblor". Por un lado el dolor de haber errado el camino y por el otro la alegría de haber encontrado la ruta.
Después de un tiempo, la situación del Jasid mejoró.
Debemos sentir, este Rosh Hashana, el temor de habernos alejado del camino y la alegría de volver de vuelta a casa. Hashem en su inmensa misericordia nos recibirá con las manos abiertas.
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