“¿Por qué permanecerás afuera? He desocupado la casa, y hay lugar para los camellos” (Jaiei Sara 24, 31)
Lavan, el malvado, ofrece el ingreso a su casa a Eliezer. Pero ¿Por qué le dice que desocupó su casa?
Explican nuestros Sabios que desocupó su casa de idolatría. ¿De qué idolatría? La idolatría de pensar que no hay lugar en mi casa para los invitados. Y recién cuando uno se despoja de este tipo de idolatría y se imbuye de fe, pensando que es Hashem quien nos da el sustento, pueden entrar los invitados en ella.
Lavan, el malvado, ofrece el ingreso a su casa a Eliezer. Pero ¿Por qué le dice que desocupó su casa?
Explican nuestros Sabios que desocupó su casa de idolatría. ¿De qué idolatría? La idolatría de pensar que no hay lugar en mi casa para los invitados. Y recién cuando uno se despoja de este tipo de idolatría y se imbuye de fe, pensando que es Hashem quien nos da el sustento, pueden entrar los invitados en ella.
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