Nos cuenta la Tradición judía que él primer hombre fue creado único y de el provenimos todos nosotros. El motivo es para que cada uno de nosotros tome conciencia de su responsabilidad como individuo y no tire la pelota al corner, evadiendo compromisos.
Así nos dice el Talmud: "El mundo fue creado para mí". Este enunciado tiene el fin de que la persona entienda que yo tengo una misión que solo yo puedo hacerla y es en vano que delegue responsabilidades.
En Rosh Hashana el primer hombre fue creado y este es un principio básico para meditar durante el sagrado día que deviene.
El hombre entra en armonía cuando es capaz de jugar con el factor individuo y el factor comunidad, aceptando los desafíos. Ya nos dice la Mishna: Sin no soy para mi ¿Quien soy? Y si solo soy para mi ¿Que soy? Y si no es ahora ¿Cuando?
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