1 Entonces Moshé y los Hijos de entonaron este cántico (shirá) al Eterno… (Beshalaj 15)
Explican los Sabios que la palabra “Shirá” esta en femenino. El motivo es que solo las mujeres pueden realmente alabar al Eterno verdaderamente.
Las mujeres durante el embarazo sufren diferentes dolores y trastornos. Ni que hablar durante el parto, y ni que hablar en la crianza de los hijos. Pero todo desaparece cuando son capaces de ver la enorme bendición de tener un hijo.
Del mismo modo, la persona tiene que saber alabar al Eterno, incluso que sea difícil, ya que en definitiva El Eterno solo quiere bendecir a la persona.
La palabra “Ima”, madre, tiene las letras de “Emuná” (Alef, mem), ya que solo las mujeres que saben de sufrimientos, se fortifican al apreciar la bendición del Eterno, al punto que a pesar de todos los traumas pasados con el embarazo, persisten en querer tener más hijos.
Por eso el pueblo de Israel tienen que aprender a tener fe, sabiendo que siempre aguarda un camino de bendición.
Se cuenta de una señora en Israel que siempre tiene preparada una mochila con provisiones en caso de atentados, de modo de salir corriendo para evacuarse con sus hijos.
Le preguntaron: ¿Cómo se pude vivir así? Y ella respondió, que en realidad tiene dos mochilas. Una para salir a los refugios, y otra para salir a la sala de parto…
Que en mérito a las mujeres sagradas de Israel, venga muy pronto la gueulá.
Explican los Sabios que la palabra “Shirá” esta en femenino. El motivo es que solo las mujeres pueden realmente alabar al Eterno verdaderamente.
Las mujeres durante el embarazo sufren diferentes dolores y trastornos. Ni que hablar durante el parto, y ni que hablar en la crianza de los hijos. Pero todo desaparece cuando son capaces de ver la enorme bendición de tener un hijo.
Del mismo modo, la persona tiene que saber alabar al Eterno, incluso que sea difícil, ya que en definitiva El Eterno solo quiere bendecir a la persona.
La palabra “Ima”, madre, tiene las letras de “Emuná” (Alef, mem), ya que solo las mujeres que saben de sufrimientos, se fortifican al apreciar la bendición del Eterno, al punto que a pesar de todos los traumas pasados con el embarazo, persisten en querer tener más hijos.
Por eso el pueblo de Israel tienen que aprender a tener fe, sabiendo que siempre aguarda un camino de bendición.
Se cuenta de una señora en Israel que siempre tiene preparada una mochila con provisiones en caso de atentados, de modo de salir corriendo para evacuarse con sus hijos.
Le preguntaron: ¿Cómo se pude vivir así? Y ella respondió, que en realidad tiene dos mochilas. Una para salir a los refugios, y otra para salir a la sala de parto…
Que en mérito a las mujeres sagradas de Israel, venga muy pronto la gueulá.
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