“Cántico de Asaf. Señor, los paganos invadieron tu herencia, profanaron tu santo Templo, hicieron de Jerusalém un montón de ruinas” (Salmo 79)
Es conocida la pregunta: ¿Cómo pudo Asaf “cantar” viendo la destrucción de Jerusalém?
El dijo: Hashem se enojó con Su pueblo, destruyó piedras y maderas, pero su pueblo vive.
Dicen los Sabios que este principio es muy importante para tener en cuenta: Muchas veces se pierden cosas materiales, y esto mismo viene de la misericordia divina, para que la persona entienda su mal proceder y retorne al Eterno.
Hashem al disgustarse con Su pueblo por su mal comportamiento, le quitó El Beit Hamikdash, exiliándolo, pero no les quito la vida, esperando que vuelvan a El en arrepentimiento, otorgándoles tras su retorno una Casa más elevada.
Es conocida la pregunta: ¿Cómo pudo Asaf “cantar” viendo la destrucción de Jerusalém?
El dijo: Hashem se enojó con Su pueblo, destruyó piedras y maderas, pero su pueblo vive.
Dicen los Sabios que este principio es muy importante para tener en cuenta: Muchas veces se pierden cosas materiales, y esto mismo viene de la misericordia divina, para que la persona entienda su mal proceder y retorne al Eterno.
Hashem al disgustarse con Su pueblo por su mal comportamiento, le quitó El Beit Hamikdash, exiliándolo, pero no les quito la vida, esperando que vuelvan a El en arrepentimiento, otorgándoles tras su retorno una Casa más elevada.
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