“Hambrientos y sedientos, su alma desfallecía en ellos..."(Salmo 107)
Explica la Kabala: Cuando se ve a una persona “hambrienta y sedienta” por las cosas de este mundo, en realidad, lo que está “desfalleciendo, es su alma”.
La carencia del espíritu genera que la persona no se encuentre saciada, buscando caminos alternativos, superfluos, para llenar faltante.
Pero cuando uno sabe que la única manera de llenar el alma es con la Torá, de repente se verá que se comienza a prescindir de extravagancias.
La manera de combatir los excesos es llenando el espíritu que se encuentra sediento de verdad.
Explica la Kabala: Cuando se ve a una persona “hambrienta y sedienta” por las cosas de este mundo, en realidad, lo que está “desfalleciendo, es su alma”.
La carencia del espíritu genera que la persona no se encuentre saciada, buscando caminos alternativos, superfluos, para llenar faltante.
Pero cuando uno sabe que la única manera de llenar el alma es con la Torá, de repente se verá que se comienza a prescindir de extravagancias.
La manera de combatir los excesos es llenando el espíritu que se encuentra sediento de verdad.
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