9 Y será para ti señal en tu brazo y recordatorio entre tus ojos, para que la Torá de El Eterno esté en tu boca, pues con mano fuerte El Eterno os sacó de Egipto (Bo 13)
Explica la Kabala: El Tefilín de la “mano” se relaciona con “señal”, mientras que el Tefilin que se coloca sobre la “cabeza” se relaciona con “recordatorio”.
La “mano” hace referencia al alma tal como desciende al mundo. En el mundo el alma deberá constantemente interpretar las “señales” del Eterno, para poder acercarse a El.
Ese es el motivo que el Tefilín de la mano puede estar cubierto al ser colocado, ya que en este mundo todo está “cubierto”.
Pero el Tefilin de la cabeza, no puede estar cubierto, sino que debe estar manifiesto. El motivo es porque la “cabeza” hace referencia al alma en su estado previo a descender a este mundo.
Al estudiar Torá, el alma se revela y se “recuerda” de su estado inicial, tal como estaba antes de bajar al mundo, y por eso debe estar “descubierto” el Tefilin de la cabeza, ya que la “cabeza” debe revelar al Eterno, “recordando” el objetivo.
Las correas que van desde el Tefilin de la cabeza hacia abajo, tienen el objetivo de “unir” la “cabeza” con el mundo, la “mano”, de modo que le sea más fácil a la “mano” interpretar las señales de este mundo.
De este modo, “la Torá estará en la boca de la persona”, pudiendo “salir de Egipto”, dejando de estar subyugado a la esclavitud a los placeres de este mundo, hacia la libertad del alma.
La plegaria es el momento para ponerse los Tefilin, en donde la persona tiene el poder de atraer bendición a este mundo. La salida de Egipto se compara a un parto. La libertad del alma y la bendición, es comparable al nacimiento del pueblo a la salida de Egipto.
Explica la Kabala: El Tefilín de la “mano” se relaciona con “señal”, mientras que el Tefilin que se coloca sobre la “cabeza” se relaciona con “recordatorio”.
La “mano” hace referencia al alma tal como desciende al mundo. En el mundo el alma deberá constantemente interpretar las “señales” del Eterno, para poder acercarse a El.
Ese es el motivo que el Tefilín de la mano puede estar cubierto al ser colocado, ya que en este mundo todo está “cubierto”.
Pero el Tefilin de la cabeza, no puede estar cubierto, sino que debe estar manifiesto. El motivo es porque la “cabeza” hace referencia al alma en su estado previo a descender a este mundo.
Al estudiar Torá, el alma se revela y se “recuerda” de su estado inicial, tal como estaba antes de bajar al mundo, y por eso debe estar “descubierto” el Tefilin de la cabeza, ya que la “cabeza” debe revelar al Eterno, “recordando” el objetivo.
Las correas que van desde el Tefilin de la cabeza hacia abajo, tienen el objetivo de “unir” la “cabeza” con el mundo, la “mano”, de modo que le sea más fácil a la “mano” interpretar las señales de este mundo.
De este modo, “la Torá estará en la boca de la persona”, pudiendo “salir de Egipto”, dejando de estar subyugado a la esclavitud a los placeres de este mundo, hacia la libertad del alma.
La plegaria es el momento para ponerse los Tefilin, en donde la persona tiene el poder de atraer bendición a este mundo. La salida de Egipto se compara a un parto. La libertad del alma y la bendición, es comparable al nacimiento del pueblo a la salida de Egipto.
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