Iosef, a la edad de diecisiete años, era pastor del rebaño junto con sus hermanos, era un joven con los hijos de Bilá y los hijos de Zilpá, mujeres de su padre; y “Iosef traía a su padre malos informes acerca de ellos”. (Vaieshev 37,2)
Dicen nuestros Sabios que Iosef acusaba a sus hermanos delante de su padre de despreciar a los hijos de sus concubinas, argumentando que ellos los burlaban diciendo que eran esclavos.
Dicen nuestros Sabios que Iosef acusaba a sus hermanos delante de su padre de despreciar a los hijos de sus concubinas, argumentando que ellos los burlaban diciendo que eran esclavos.
Además Iosef acusaba a sus hermanos de ser sospechosos de tener relaciones sexuales prohibidas.
Por acusar de que sus hermanos burlaban a los hijos de las concubinas diciendo que eran esclavos fue vendido como esclavo.
Y por acusar a sus hermanas de ser sospechosos de tener relaciones prohibidas tuvo que pasar una gran prueba de índole sexual cuando la esposa del ministro del Faraón lo incitó al pecado.
Todo es causa y consecuencia en la vida.
Por acusar de que sus hermanos burlaban a los hijos de las concubinas diciendo que eran esclavos fue vendido como esclavo.
Y por acusar a sus hermanas de ser sospechosos de tener relaciones prohibidas tuvo que pasar una gran prueba de índole sexual cuando la esposa del ministro del Faraón lo incitó al pecado.
Todo es causa y consecuencia en la vida.
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