13… Y he aquí que la superficie del terreno se había secado. 14 Y el segundo mes, el veintisiete del mes, la tierra se había secado por completo. (Noaj 8)
Explican los Sabios: Primero el “terreno se secó”, y luego la “tierra se secó completamente”. Ya la “frescura” de la tierra había desaparecido, y todo a causa del comportamiento humano.
Así sucedió con los dos Templos de Jerusalém: El primero fue destruido, pero el segundo la destrucción fue más grande, y por eso el exilio es más duradero, ya que la degradación y la decadencia es constante cuando no se reparan las cosas.
Es así con la persona, que cuando no arregla su situación espiritual a tiempo, va en descenso y cada vez es más difícil reparar.
Pero cuando la persona retorna al Eterno, puede transformar la oscuridad en una gran luz, como está escrito: “El pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz; los que moraban en tierra de sombra de muerte, luz resplandeció sobre ellos” (Isaías 9:1-2).
Explican los Sabios: Justamente porque “andaban en tinieblas”, pudieron apreciar “una gran luz”, ya que la verdadera luz se aprecia al haber habido oscuridad previamente.
El extenso exilio tiene el fin de que la persona vuelva al Eterno, y poder ser recipientes a la manifestación del tercer Beit Hamikdash.
En el primer Beit Hamikdash se podían percibir milagros que no se podían apreciar en el segundo, pero Hashem pretende que la persona retorne a El y que perciba más revelación de la que había en el primer Beit Hamikdash.
Explican los Sabios: Primero el “terreno se secó”, y luego la “tierra se secó completamente”. Ya la “frescura” de la tierra había desaparecido, y todo a causa del comportamiento humano.
Así sucedió con los dos Templos de Jerusalém: El primero fue destruido, pero el segundo la destrucción fue más grande, y por eso el exilio es más duradero, ya que la degradación y la decadencia es constante cuando no se reparan las cosas.
Es así con la persona, que cuando no arregla su situación espiritual a tiempo, va en descenso y cada vez es más difícil reparar.
Pero cuando la persona retorna al Eterno, puede transformar la oscuridad en una gran luz, como está escrito: “El pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz; los que moraban en tierra de sombra de muerte, luz resplandeció sobre ellos” (Isaías 9:1-2).
Explican los Sabios: Justamente porque “andaban en tinieblas”, pudieron apreciar “una gran luz”, ya que la verdadera luz se aprecia al haber habido oscuridad previamente.
El extenso exilio tiene el fin de que la persona vuelva al Eterno, y poder ser recipientes a la manifestación del tercer Beit Hamikdash.
En el primer Beit Hamikdash se podían percibir milagros que no se podían apreciar en el segundo, pero Hashem pretende que la persona retorne a El y que perciba más revelación de la que había en el primer Beit Hamikdash.
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