“Porque El está a la diestra del pobre, para salvarlo de los que juzgan su alma” (Salmo 109, 31)
Explican los Sabios: El “pobre” es el alma, que está atrapada por el cuerpo sin poder surgir.
Pero Hashem “salva” cuando “juzgan su alma”, cuando la persona analiza que es lo importante y que es lo secundario en su vida.
Cuando la persona se juzga a si misma, resolviendo no ser tan considerada con las cosas materiales, el “pobre”, el alma, comienza a surgir. Es en ese momento que la persona se “salva” de no quedar atrapada por las fuerzas de la decadencia.
Explican los Sabios: El “pobre” es el alma, que está atrapada por el cuerpo sin poder surgir.
Pero Hashem “salva” cuando “juzgan su alma”, cuando la persona analiza que es lo importante y que es lo secundario en su vida.
Cuando la persona se juzga a si misma, resolviendo no ser tan considerada con las cosas materiales, el “pobre”, el alma, comienza a surgir. Es en ese momento que la persona se “salva” de no quedar atrapada por las fuerzas de la decadencia.
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